El Tour de Francia de 2024 terminará en Niza en lugar de París, un hecho que no ocurre desde 1905, debido a los Juegos Olímpicos, y con una contrarreloj, 35 años después del legendario desenlace entre el estadounidense Greg Lemond y el francés Laurent Fignon.
Como suele ser el caso en un año olímpico, la salida de la edición 111 de la 'Grande Boucle', que comenzará por primera vez desde la ciudad italiana de Florencia, se adelantará una semana. La vuelta dará el pistoletazo de salida el 29 de junio y finalizará el 21 de julio, cinco días antes del inicio de las Olimpiadas, indicaron este jueves el ayuntamiento de Niza y los organizadores de la ronda francesa en rueda de prensa.
"En 37 ocasiones Niza acogió el Tour con dos salidas en 1981 y 2020", este último "en un contexto sanitario muy difícil" con la pandemia de COVID-19, señaló el alcalde de Niza, Christian Estrosi.
En julio, la ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, indicó que, para evitar "la dispersión de las fuerzas de seguridad" en este período, "la llegada del Tour de Francia se anticipará un poco y probablemente no se hará en París sino más bien en Niza".
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Este cambio resulta una pequeña revolución, puesto que la carrera más famosa del mundo siempre ha terminado en París, a excepción de las dos primeras ediciones en 1903 y 1904, con llegadas a Ville d'Avray (en las inmediaciones de la capital). Las metas en París fueron primero en el Parque de los Príncipes (de 1906 a 1967); luego, en el velódromo de la Cipale (1968 a 1975); y desde 1975 en los Campos Elíseos.
Decoración excepcional
La elección de Niza se impuso rápidamente, ya que la ciudad de la Costa Azul organiza cada año la París-Niza y, recientemente, la salida del Tour de 2020, retrasado a septiembre debido por el COVID-19.
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El regidor de Niza "fue el primero en aceptar que la moviéramos dos meses", explicó a la agencia 'AFP' el director del Tour, Christian Prudhomme. "No lo hemos olvidado, pero 2024 es ante todo porque Niza lo merece. Niza es una ciudad radiante, conocida mundialmente", prosiguió el organizador quien destacó la "decoración excepcional" de la urbe.
Para este Tour, los organizadores están planeando un "último fin de semana de fuegos artificiales" en la Riviera francesa. Primero, el sábado, con una etapa "orientada a la montaña" y con salida desde Niza. Y, segundo, al día siguiente, una contrarreloj individual que podría comenzar en Mónaco.
Los 8 segundos de 1989
Se trata de la primera vez que el Tour acabará con una crono desde el mítico final de 1989, cuando el francés Laurent Fignon, fallecido en 2010 por un cáncer, perdió el 'maillot amarillo' por ocho segundos, la menor diferencia de la historia, frente al estadounidense Greg Lemond, entre Versalles y los Campos Elíseos.
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La última contrarreloj se suele organizar en la penúltima etapa, aunque no siempre es una regla. El próximo año, por ejemplo, tendrá lugar el martes, cinco días antes de que finalice la carrera.
En 2024, podría estar en juego a priori hasta el último segundo de los primeros puestos de la clasificación general, cuando los corredores solían descorchar el champagne en la penúltima prueba.
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En cuanto al perfil de la carrera, Prudhomme no quiso revelar nada, aunque incidió en que "no recorrerá diez kilómetros" y en que "sería una pena que fuera todo en llano".
En 2025 ya está prevista la vuelta a la normalidad. "Estaremos encantados de reencontrarnos con París y los Campos Elíseos en el 50 aniversario de la primera llegada" a la famosa avenida parisina, subrayó el director del Tour.