Hace un par de semanas, Flor Marina Gómez, madre de Egan Bernal, publicó en sus redes sociales que había superado el cáncer de seno y que viviría su última quimioterapia. Acompañada de sus seres queridos, está mujer luchó y superó esta grave enfermedad.
El pasado domingo, doña Flor estuvo hablando con el programa 'La Red' de Caracol Televisión y allí contó detalles inéditos de cómo vivió esta experiencia, que la tiene más fuerte. Además relató lo que le dijo Egan en el momento en que se enteró.
"Fui a que me hicieran unos chequeos, que me hicieran exámenes, dentro de ellos incluía una mamografía. Allí no encontraron nada, pero posteriormente, en una ecografía encontraron la 'masita'", inició su relato, sobre el comienzo de esta historia. Tres días después, a Flor Marina le hicieron una biopsia, que confirmó el cáncer.
Recordemos que esto sucedió a mediados de junio, pocos meses después de que Egan Bernal sufriera ese grave accidente en Cundinamarca que lo tuvo varios días en estado crítico y que lo obligó a pasar por el quirófano.
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"Si a uno le mencionan el cáncer, uno de una vez lo relaciona con la muerte. Era muy difícil, yo no lo asimilaba. Decía que eso no me podía estar pasando a mí, todo porque me sentía muy saludable. Yo sentía que la gente se había equivocado. El aliento siempre fue que estaba en etapa 2 y que se había detectado a tiempo", agregó.
El ciclista de Zipaquirá estuvo entre la 'espada' y la 'pared', pues en el momento en el que el INEOS lo llamó para asistir a un proceso de recuperación en Europa, recibió este 'baldado de agua fría' por parte de su madre.
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"Acabábamos de superar todo lo que había pasado con Egan. Él dijo que no quería irse porque no quería dejarme así, pero yo le dije que tenía que irse", reveló.
Igualmente, relató cómo vivió la caída de su cabello, uno de los aspectos que más cambió en su cuerpo, mientras estuvo en tratamiento: "Dolía un poco el ego femenino, pero si ese era el costo por estar viva, estaba dispuesta a aceptarlo. El día que me corté el pelo me dolió demasiado físicamente".
Ya superada esta horrible enfermedad, Flor Marina Gómez cuenta cuáles son los pasos a seguir: “Mi cáncer es hormonodependiente, lo que quiere decir que se alimenta en mis hormonas. Ahora debo tener un tratamiento de, más o menos, cinco años con pastillas”.
Para culminar, dejó una reflexión para todas las mujeres: "Haber hecho ejercicio durante un buen tiempo, me preparó para estar fuerte. Tenía muy buena masa muscular, para mi edad. Mi invitación es que las mujeres se hagan el autoexamen y que vayan a los chequeos frecuentes".
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