“Vengo a hacer mi trabajo como siempre, ver mis pacientes de cuidados intensivos, con COVID-19, con el mismo entusiasmo de todos los días”, dijo con la voz quebrada el doctor José Julián Buelvas, que denunció graves amenazas de muerte contra él y su familia.
“Si no renuncia me va a dar el placer enorme de matarlo”, decía la nota que acompañaba una de las dos coronas fúnebres que le enviaron a su casa y a la Clínica Adelita de Char en Soledad, donde también ejerce su profesión.
Según las amenazas, Buelvas dejó morir a una paciente, cosa que negó tajantemente el especialista.
“Los médicos no estamos formados para asesinar a nadie ni para dejar morir a nadie, estamos formados para salvar vidas, es lo que hacemos día a día. Ningún médico actuamos de mala fe”, afirmó el galeno minutos antes de empezar su jornada en la Clínica La Asunción, donde enfermeras y colegas aseguraron que es un profesional dedicado a sus enfermos.
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Pese a haber recibido el apoyo de la Policía Nacional y del mismo presidente Iván Duque, temeroso por él y su familia dijo que “es poco prudente regresar a Soledad. Me preocupa mucho, hay trece camas con pacientes ventilados con COVID-19”.
Asimismo, deploró que haya gente que siga desinformado al asegurar “que no existe el COVID-19, que esto es una mentira. Es terrible”.
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“El COVID-19 sí existe, sí está haciendo daño, están creciendo los contagios. Esto es un proceso en el que cada uno tiene que poner su grano de arena”, agregó.
Y manifestó su preocupación pues son los médicos los que enfrentan “la pandemia de primera cara y estás en un dilema de hacer las cosas y a pesar de hacer las cosas pueden hacerte daño”.
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