Su hermana aseguró que no conocían amenazas en su contra. Colectivos de Pasto le realizaron un homenaje y recordaron su contribución a la cultura.
"Una gran artista, una gran danzante, una gran compañera. Compartimos mucho tiempo nosotros este folklor latinoamericano”, afirmó Pablo Hernández, director de un colectivo artístico.
Felipe Solarte, amigo de la víctima, añadió: "La tristeza es demasiado grande, la impotencia que se siente por ver morir a una gran artista”.
Lucy luchaba por la reivindicación de los derechos de las mujeres y en contra de la violencia sexual.
Además, era una activa danzante del Carnaval de Negros y Blancos de Pasto, por lo que tenía reconocimiento del gremio en todo Nariño.
El general Óscar Atehortúa, director de la Policía Nacional, sostuvo que la lideresa “no tenía amenazas conocidas por la autoridad”.
Y añadió que se está recolectando información para dar con los responsables.
Lucy Villareal fue baleada el martes por unos sicarios cuando terminaba un taller con niños en Tumaco.
Su cuerpo será velado en cámara ardiente en el paraninfo de la Universidad de Nariño.