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Excombatientes exigen ayuda del Gobierno Nacional para echar raíces en el Urabá antioqueño

Los 93 exguerrilleros que se trasladaron desde Ituango a Mutatá permanecen en las pesebreras de una finca. Esperan ayuda para construir una vivienda digna.

Durante 24 horas, 93 excombatientes recorrieron más de 300 kilómetros para llegar al Urabá antioqueño y echar raíces, pero las condiciones de su albergue, no son las mejores.

En dos pesebreras de una finca permanecen los exguerrilleros de las FARC con sus familias, luego de que llegaran a Mutatá, procedentes del espacio territorial de Santa Lucía, en Ituango.

Ellos esperan que el gobierno les ayude a construir una vivienda digna y fortalecer sus proyectos productivos que tuvieron que dejar atrás por condiciones de seguridad.

“Las condiciones en este momento son infrahumanas. Infrahumanas porque usted puede mirar aquí cómo tenemos todos nuestros enseres, no tenemos ningún tipo de servicio de baño”, lamentó Juan de Dios Quintero, excombatiente.

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Como han podido se han organizado en la finca, ubicada en la vereda La Fortuna, de Mutatá, en elUrabá antioqueño .

"Tenemos una gente allá en el hangar del camarada Rubén Cano, es decir, allá habitando unas casas prestadas, mientras nosotros podemos resolver aquí. Yo estoy allí con unas cuatro familias en esta casa grande, me tocó dormir en el piso porque no había donde dormir”, contó Juan de Dios.

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Las mujeres confían en que todo será mejor y le siguen apostando a la paz. La esperanza no la pierden.

“Le exigimos al gobierno que nos ayude, si la gente no encuentra el apoyo de poder tener una vivienda digna pues la gente se va a dispersar porque cada quien tiene que salir a buscar su forma de vida”, advirtió Deysi Echavarría, excombatiente.

Estas tierras significan la esperanza para las 93 familias que llegaron desde el municipio de Ituango a la vereda La Fortuna, en Mutatá, buscando seguridad y mejorar su calidad de vida.

En estas tierras esperan encontrar tranquilidad con las otras tres comunidades de paz que ya están en esta zona del país y en las que han encontrado apoyo.

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“Nosotros estamos focalizados en el momento en establecernos acá como comunidad y en el tema de los proyectos productivos de la cooperativa de la mano de las comunidades cercanas”, dijo Jhon Taborda, excombatiente.

Las autoridades han seguido de cerca el proceso de traslado y acompañando la situación que hoy viven los excombatientes.

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Es una responsabilidad del Gobierno Nacional, del departamental y lógicamente de la Administración Municipal, donde estaremos articulados para que esas personas sean tratadas de manera digna”, acotó la alcaldesa de Mutatá, María Esilda Palacios.

Los excombatientes realizarán asambleas para definir los terrenos que van a utilizar cada uno y allí poder ejecutar sus proyectos productivos.

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