El proceso 001 de la JEP: así fue la histórica cita de FARC con la justicia

Fue la notificación del proceso por miles de secuestros. No hubo cara a cara con las víctimas. Esperan sea el primer paso para conocer la verdad.

Con el puño en alto, sonriente y a paso firme, así llegó a la sala de audiencias de la JEP Rodrigo Londoño Echeverry, ‘Timochenko’, el máximo líder de la FARC, para cumplir una cita que durante varios años aplazó con la justicia.

"Y estoy aquí, a su disposición, con una profunda emoción, de ver cómo se cristaliza ese sueño que tejimos en La Habana”, dijo.

Fueron 31 los citados. Sin embargo, a 'Timochenko' solo lo acompañaron sus camaradas Carlos Antonio Lozada y 'Pablo Catatumbo', quien llegó con un ramo de rosas.

“Manifiesto mi total disposición a comparecer a todas las diligencias a que sea convocado por parte de la JEP", afirmó este último.

A través de videoconferencia, desde la cárcel La Picota, también hizo su aparición 'Jesús Santrich', el excabecilla guerrillero acusado de narcotráfico, quien insistió en un complot en su contra.

"Ustedes saben que estoy en una situación de detención ilegal en la cárcel La Picota, aislado (...) pero aquí traté de venir", sostuvo.

La audiencia, que empezó a las tres de la tarde del viernes, y fue programada para que durara una hora y media, se extendió hasta las seis. El principal motivo del retraso: los poderes que varios exguerrilleros ausentes les entregaron a sus abogados, pero que no fueron notariados.

Al final, tanto la sala de reconocimiento y verdad, como la Procuraduría, reconocieron la trascendencia de este caso, el número 001 de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP).

“El inicio de esta etapa es un acontecimiento histórico que constituye un paso fundamental en los esfuerzos para poner fin a un largo conflicto armado", aseguró Julieta Lemaitre, presidenta de la sala de reconocimiento.

"Que sea este el momento oportuno para hacer un llamado a honrar la paz, la palabra, la memoria de los fallecidos y la dignidad de Colombia", agregó Mónica Cifuentes, delegada de la Procuraduría.

Mientras tanto, afuera de la JEP algunas víctimas alzaron su voz para exigir que se cumpla lo mínimo que se pactó entre el Gobierno y las FARC: verdad, justicia, reparación y no repetición.

"Es importante que nosotros hubiéramos podido entrar porque así descansaríamos, les hubiéramos preguntado a ellos directamente qué pasó con nuestro familiar", lamentó Merly Mahecha, hermana de un secuestrado.

"Hay 736 secuestrados que tienen las FARC y nos han negado. que nos digan la verdad", añadió, indignada, Blanca Flórez, líder de las madres víctimas de esa guerrilla.

Tras la audiencia, y en un tono más vehemente, 'Timochenko' no se ahorró señalamientos contra la fuerza pública e incluso contra los medios de comunicación.  

"La diligencia de esta tarde fue concebida como de carácter reservado. Consideramos que la presencia de los medios en ella, su transmisión en directo y la filtración previa del informe de la Fiscalía a la prensa, constituyen una violación clara a lo acordado", dijo.

A partir de ahora se deberá empezar a esclarecer lo que ocurrió con las 8.163 víctimas de secuestro o desaparición, entre 1993 y 2012, con el compromiso de la FARC de entregar la información que tengan al respecto y con la ayuda de las organizaciones sociales, las entidades del Estado y la sociedad civil en general.

Después tendrán que volver a comparecer individualmente, aceptar o no los cargos que les atribuye la justicia y comenzar a reparar a las miles de víctimas que dejaron por toda Colombia durante más de 50 años de conflicto armado.

En contexto:

Timochenko y otros 30 excabecillas de las FARC comparecieron por primera vez ante la JEP