La fachada de la casa del niño, que completa seis días secuestrado, se ha convertido en muro de indignación y esperanza al mismo tiempo.
En medio de la angustia, se conoce el testimonio de Isabel, bisabuela de Cristo José y quien se une al pedido de todo un país: “Que lo liberen pronto, que están haciendo sufrir la familia y que es un dolor para ellos. El niño también sufriendo por allá”.
Ella, de 85 años, recuerda con cariño al pequeño y cuenta que “llegaba a la casa y le decía: ‘abuelita la bendición, me deja pasar al solar a coger manguitos’”.
Como esta bisabuela, decenas en El Carmen tuvieron una noche de oración y prendieron velas para pedir por su pronto regreso.
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El domingo, el presidente Duque visitó a la familia:
Iván Duque se reunió con la familia de Cristo José, niño secuestrado en El Carmen